Dos personas de origen mongol han contraído la peste el pasado martes 12 de noviembre, enfermedad causada por la misma bacteria responsable de la peste negra, epidemia que en la Edad Media mató a un tercio de la población europea. Actualmente, se encuentran siendo tratados por profesionales médicos en el distrito de Chaoyang, en Pekín.
En mayo de este mismo año, una pareja procedente de Mongolia murió de peste bubónica tras ingerir carne cruda de marmota, específicamente el riñón, que es considerada un remedio para la buena salud.
La peste negra, peste bubónica o muerte negra fue una epidemia que azotó el mundo alrededor de 1348 y erradicó a un tercio de la población europea, así como a 60 millones de personas a nivel global en aquella época. Actualmente, afecta a menos de 5.000 personas al año en todo el mundo y es más común en zonas rurales.
La enfermedad, como tal, se divide en tres. Ordenadas de menor a mayor, según su nivel de letalidad son: la peste bubónica, la peste septicémica y la peste pulmonar.
Peste bubónica
Esta es la forma más común de la peste, se le llama bubónica debido a que afecta principalmente los ganglios linfáticos (bubones). Los ganglios pueden estar localizados en el cuello, las axilas y la ingle.
Los síntomas más comunes de la peste bubónica incluyen fiebre y escalofríos, malestar general, dolores musculares y dolor de cabeza intenso y repentino.
Peste septicémica
Se le denomina septicémica cuando la plaga ha migrado de los ganglios al torrente sanguíneo.
Sus síntomas más recurrentes incluyen la debilidad corporal extrema, diarrea, vómito, el sangrado bucal y debajo de la piel, así como la gangrena (muerte del tejido) en zonas como los dedos de las manos y pies, y la nariz.
Peste pulmonar
La peste pulmonar es la categoría más peligrosa de la peste, debido a que su contagio no está limitado al contacto con animales, sino que en su mayoría es transmitida por los seres humanos. Como bien da a entender su nombre afecta los pulmones, y se contagia mediante micropartículas expulsadas con la tos o estornudos.
La tos con sangre, el vómito (con y sin sangre), las náuseas, fiebre alta y dolor en el pecho son algunos de los síntomas más comunes de la peste pulmonar.
Debido a la zona que afecta, es de vital importancia que se busque atención médica antes de que se cumplan 24 horas de la aparición de los primeros síntomas, de otra manera puede ser mortal.
Contagio
La enfermedad es causada por la bacteria Yersinia Pestis, que se encuentra generalmente en los pequeños roedores (ratas, ratones, ardillas y conejos) de las zonas rurales de Asia, África y Estados Unidos.
Dicha bacteria puede llegar al organismo humano de tres maneras: Mediante la picadura de una pulga que se haya alimentado de un roedor infectado; Teniendo contacto con personas que hayan tocado a algún animal infectado; Tras la picadura de un piojo que haya picado a personas infectadas
Consecuencias
La falta de diagnóstico y tratamiento para esta enfermedad puede tener consecuencias como lo gangrena (muerte del tejido, las zonas afectadas tienen que ser amputadas), la muerte, y en raras ocasiones, la meningitis (inflamación de las membranas que rodean el cerebro y la médula espinal).