“En una época en la que a las mujeres se les representa como embajadoras de la belleza y la perfección, he pensado que era importante recordar que existe una belleza diferente, más real y auténtica, no manipulada por la publicidad ni por nada”, comenta Sergio Lardíez, fotógrafo de la exposición.
La exposición Libres comienza el 15 de septiembre y va a permanecer durante todo el mes en la Galería Modus Operandi de Madrid. Este proyecto cuenta además con actividades complementarias como conciertos acústicos, microrrelatos, lecturas dramatizadas y charlas relacionadas que tendrán lugar en el Barrio de las Letras, donde se encuentra la galería.
La iniciativa surge gracias a la actriz Maggie Civantos, quien encarna el papel de Ángeles Vidal en Las chicas del cable, tras hablar con Hayat, una mujer que había conseguido librarse de la mutilación genital por decisión de su madre, y quedarse verdaderamente impactada por su historia. La intérprete se puso en contacto con Sergio Lardíez, un amigo fotógrafo y le dijo que quería aparecer desnuda junto a su madre y su abuela. “Reivindicamos la naturalidad de nuestro cuerpo, de nuestra sexualidad, la libertad que buscamos para esas mujeres”, declaró Civantos. Lardíez quiso participar y ha ido retratando a algunas de las mujeres más influyentes de la sociedad cultural e interpretativa de España, como la actriz Marta Hazas o la cantante Soraya Arnelas, junto a sus madres o sus hijas. Se ha querido reflejar la naturalidad de las mujeres, su libertad y su feminidad de una forma distinta, por eso el autor ha prescindido del uso de filtros, retoques y Photoshop.
“Yo soy libre gracias a mi madre”, afirma Hayat.
El objetivo es liberar a muchas mujeres que en el mundo se encuentran sometidas a tradiciones antiguas que les hacen estar bajo el yugo de hombres, como es la mutilación genital femenina (MGF). En este caso, después de varios años, se ha logrado que los gobiernos de algunos de los países en los que se daba esta práctica la prohíban. Aun así, el veto de este acto no ha impedido que se siga realizando la ablación a muchas niñas, pero ahora de una forma más peligrosa para su salud, ya que tiene lugar de forma clandestina.
A partir de esta idea, se ha desarrollado un proyecto que se desplazará por España y Latinoamérica con el fin de recaudar fondos para la causa Save in Nairobi que busca obtener sostenibilidad más allá de los donantes.
Construcción de un centro de rescate
La ONG Save a Girl Save a Generation está desarrollando la construcción de un centro de rescate en la capital keniana para aquellas niñas, de entre 9 y 18 años, que se encuentren en riesgo de pobreza o exclusión, o que huyan de matrimonios forzados, mutilación genital femenina, explotación sexual y violencia hacia la mujer.
Este espacio será construido en un vecindario seguro que aleje a estas niñas de los problemas de los que huyen y que, a su vez, les permita completar su crecimiento y obtener una educación de calidad para tener un futuro en el que desarrollar sus capacidades y defenderse en la sociedad. Pretende ser un lugar digno que ofrezca la posibilidad de rehabilitación y reinserción aportando alimentos, atención médica y formación profesional para las mujeres de mayor edad.
Se prevé que en los primeros cinco años el centro se encuentre en pleno rendimiento y que pueda alojar, al menos, a 20 niñas. Además, según se desarrollen sus instalaciones, pretende introducir actividades agrícolas que aporten un sustento económico propio a las residentes. Para la prosperidad del proyecto, la ONG va a contar con vínculos con los gobiernos existentes, además de socios que aporten financiación adicional.