La Unión Europea va a imponer, a partir de 2022, alcoholímetros antiarranque en los vehículos destinados al transporte de personas y de mercancías. Bruselas ya insistió, en 2019, a los países miembros que incorporaran dispositivos ADAS (Sistemas Avanzados de Asistencia al Conductor) para garantizar una mayor seguridad y prevenir accidentes.
Bruselas ya insistió en 2019 a sus países miembros que incorporaran dispositivos ADAS (Sistemas Avanzados de Asistencia al Conductor) para garantizar una mayor seguridad, así como para prevenir accidentes, a la hora de conducir.
Entre estos dispositivos, aparte del alcoholímetro, se encuentran asistentes de velocidad, sistemas que detectan la somnolencia del conductor así como si este sufre pérdida de atención o distracción, señales de frenado de emergencia o detectores de marcha atrás.
Según la UE, esta medida evitará 25.000 muertes y 140.000 heridos en los 15 años siguientes a su aplicación. De momento, los países que ya han incluido esta propuesta en su legislación son Francia, Italia, Finlandia, Suecia, Polonia y Dinamarca.
En España, se ha elaborado una nueva enmienda a la ley que, tras ser aprobada en el Congreso, se está tramitando en el Senado para ser implementada. Si es así, constituirá una nueva Ley de Tráfico y Seguridad Vial. En esta, se menciona el uso de alcoholímetros antiarranque -que reciben el nombre de Alcolock- así como de otros ocho mecanismos que ayudarán a la seguridad vial.
La norma establece que cualquier vehículo que no cuente con este sistema no podrá quedar homologado, a partir del 6 de julio de 2022. Y, desde el 7 de julio de 2024, tampoco será posible que ningún coche que no contenga los ADAS descritos en la ley salga del concesionario.
Los vehículos que están incluidos en esta nueva ley son aquellos que transporten pasajeros -de más de ocho plazas- o mercancías, cuya MMA sea mayor a 3500 kg. Asimismo a partir de 2022 es obligatorio, para todos los nuevos vehículos, llevar un interfaz que permita instalar estos dispositivos.
Según un estudio de la Dirección General de Tráfico (DGT), en colaboración con otras entidades, en 2020, el 48,7% de los conductores que fallecieron en accidentes de carretera habían consumido alcohol, drogas o psicofármacos: de un total de 597 muertes, 291 fueron producidas por el consumo de sustancias.
Funcionamiento de Alcolock:
Este alcoholímetro antiarranque analiza, a través del aliento del conductor, cuál es la tasa de alcohol del mismo. Los resultados se muestran entre unos 5 y 25 segundos y, si se sobrepasa el tope establecido por la legislación, en el caso de Europa 0,5 gramos para conductores con más de un año de carné, el vehículo quedará totalmente bloqueado. El sistema es parecido al utilizado en los controles de alcoholemia de la Policía. Además, cada vez que se haga una parada con una duración mayor de 30 minutos, se deberá volver a realizar la prueba para comprobar que los niveles de alcohol en el cuerpo no han aumentado.
Actualmente las multas o sanciones que pueden acarrear el consumo de drogas y/o alcohol son de 500 euros y la retirada de cuatro puntos, en caso de que la tasa de alcohol esté entre 0,25 y 0,5 mg/l en aire respirado, 1.000 euros y seis puntos menos si se superan los 0,5 mg/l o si, si el conductor ha dado positivo en cualquier tipo de droga, y 1.000 euros y cuatro o seis puntos menos (dependiendo de la tasa de alcohol) para conductores reincidentes.