El Tribunal Superior de Justicia de Cataluña (TSJC) ha suspendido este martes, de forma provisional, el aplazamiento de las elecciones autonómicas. Esta decisión llega tras la estimación de las medidas cautelarísimas solicitadas, por un particular, contra el decreto aprobado por el presidente en funciones, Pere Aragonès.
Esta decisión de la Sala Quinta del tribunal supone que las elecciones volverán a ser el 14 de febrero. El Gobierno catalán ha reactivado los preparativos para los comicios, que habían aplazado hasta el 30 de mayo, pero ha recordado también que esta medida se tomó debido a la situación de la pandemia. «La única inseguridad jurídica es la que está creando el Tribunal Superior de Justicia de Cataluña», ha afirmado la portavoz del Ejecutivo, Meritxell Budó.
El TSJC no ha solicitado escuchar al Gobierno catalán antes de tomar una decisión, ya que dos de las seis medidas presentadas hasta el lunes solicitaban la adopción de medidas cautelarísimas. En esta clase de medidas, no es necesario escuchar a la parte contraria, siempre que haya razones especiales y de urgencia.
La sala ha señalado que el proceso electoral del 14-F «debe continuarse» mientras «se resuelve» la solicitud con «la mayor brevedad posible». La resolución, que no admite recurso, ordena que el proceso electoral se active de inmediato, ya que es la única forma de garantizar que, si, finalmente, las elecciones no se atrasan, haya tiempo de celebrarlas con todas las garantías.
Los jueces han recordado que el proceso electoral tiene una duración de 54 días, tal y como establece la Ley de Orgánica del Régimen Electoral General (Loreg). Los plazos son «cortos y sucesivos», y abarcan diferentes ámbitos: juntas electorales, censo, formación de mesas electorales, nombramiento de representantes, administradores e interventores, candidaturas, propaganda electoral, voto por correo y campaña electoral.
La decisión de suspender el decreto es «instrumental», para «evitar que se pierda la finalidad del recurso», ya que el Gobierno de Cataluña suspendió el proceso electoral en el 25º día, por lo que si se espera más tiempo a tomar una decisión «las elecciones no se podrían celebrar en la fecha inicialmente prevista». Sin embargo, esto no significa que la suspensión del aplazamiento haya sido aprobada de forma definitiva. Los magistrados pueden cambiar de opinión, una vez hayan debatido más a fondo el asunto.
«Reactivamos el proceso electoral porque tenemos todo preparado para hacerlo», ha afirmado el consejero de Acción Exterior, Bernat Solé. El máximo responsable del dispositivo de los comicios ha invitado también a las corporaciones locales a que realicen los sorteos para elegir a los miembros de las mesas. Tanto Solé como la portavoz, Meritxell Budó, han pedido al TSJC que resuelva en el menor tiempo posible para evitar más incertidumbre en la ciudadanía.