La OCDE (Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico) señaló en su último estudio que «es importante acceder a la educación infantil cuanto antes, por el rendimiento escolar futuro y el desarrollo de habilidades sociales de los menores». A pesar de esta recomendación, en España el 62% de los menores de hasta tres años no están escolarizados. En el país solo hay un total de 468.652 inscritos en el ciclo inicial, frente a casi un millón y medio de asistentes en el ciclo siguiente, de tres a seis años.
«Todavía, en España, hay un concepto de la Educación infantil meramente asistencial y se considera que no es importante en el sentido educativo», afirma Daniel Santín, profesor de la Universidad Complutense de Madrid.
Existe mucha diferencia entre comunidades autónomas en las cifras de matriculación de menores en el primer ciclo. Según informes del Ministerio de Educación y el INE (Instituto Nacional de Estadística), el País Vasco, una de las autonomías con las cifras más altas, tiene un 52,4% de alumnos inscritos en este ciclo, Andalucía cuenta con un 44%, y Canarias, con uno de los porcentajes más bajos, sólo con el 16,4%. Si bien este ciclo no está cubierto por la enseñanza obligatoria, según educadores y pedagogos es fundamental para el desarrollo intelectual y social de los menores, y un estudio de la Universidad Complutense de Madrid afirma que «los años recibidos en educación Infantil afectan significativamente y de forma positiva al rendimiento académico de los alumnos en Primaria».
Daniel Santín, profesor de la Universidad Complutense de Madrid, basándose en su estudio Reflexiones sobre el sistema educativo español, afirmó a Europa Press que «todavía, en España, hay un concepto de la Educación infantil meramente asistencial y se considera que no es importante en el sentido educativo», y enfatizó que «invertir en esta etapa supone un rédito muy importante para la población», según han demostrado diversos estudios internacionales.