El petróleo y el gas natural han registrado, tras el ataque de Rusia a Ucrania, subidas superiores al 6%. El crudo Brent, referencia en Europa, ha superado el valor de 100 dólares por barril, cifra calificada por los expertos como “inédita”. Las bolsas europeas también se han visto afectadas por esta situación.
Desde el comienzo de 2022, el Brent se ha disparado en un 30%, y se aleja de los 79,32 dólares que costaba a finales de 2021. Todo ello, provocado por la importancia de Rusia y Ucrania en el sector energético hacia Europa. “El conflicto podría generar un pico inadmisible de demanda que generaría una gran crisis de abastecimiento en el resto del mundo”, ha informado el National Australia Bank, a través de un informe de la situación.
Según los analistas de JP Morgan, podría verse interrumpido el suministro de petróleo en unos dos millones de barriles al día, lo que haría aumentar el precio del barril de petróleo a 150 dólares. “Vamos a vivir una crisis parecida a la crisis los misiles de Cuba, en 1962”, aseguró el secretario británico de Economía, Rishi Sunak.
Rusia es el mayor exportador de petróleo a Europa. Así lo recoge el último informe del que se dispone, de 2018, por delante de Noruega. Ambos países componen dos tercios de las importaciones de petróleo. Rusia también es el mayor exportador de gas y carbón a la Unión Europea.
Aunque Rusia dejara de abastecer con recursos energéticos, países como Estados Unidos y Qatar se han ofrecido a ayudar a la Unión Europea. Si se diese esta situación, España obtendría un papel geográficamente estratégico para el transporte de dichos recursos energéticos.
La demanda
El requerimiento de petróleo también crece. La Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) junto con sus aliados, políticos y económicos, se han negado a un aumento inmediato de suministro para “equilibrar la oferta y la demanda”. La cifra total de suministro en barriles de petróleo es de 400.000 barriles diarios cada mes.
De hecho, países como Japón, India y Estados Unidos solicitaron un aumento de suministro hace unos meses, una propuesta que oscilaba entre los 600.000 y 800.000 barriles diarios. Aun así, según informa el Gobierno de EE.UU., la OPEP “hace oídos sordos a las propuestas”.