Dimite la embajadora de EE.UU. ante Naciones Unidas

- Desmarcar - 18 de octubre de 2018
Nikki Haley. Foto: Flikr-CC
331 views 7 mins 0 Comments

Con información de Miriam Romero y Judit Fernández Safir

Nikki Haley, conocida por ser la embajadora de EE.UU. en la ONU y uno de los personajes principales del equipo de Donald Trump, ha anunciado la retirada de su cargo a finales de año. Lo ha hecho en una comparecencia conjunta con el presidente, en la que ambos se han negado a dar respuesta a las incógnitas de quién será su sucesor y cuáles son los planes de futuro de la propia Haley.

Con su marcha, Nikki Haley se ha sumado a las más de 20 personas que han renunciado a sus cargos dentro del gabinete presidencial. Algunos de ellos presentaron su dimisión y otros fueron expulsados por el propio Trump.

A pesar de que durante la campaña electoral Haley fue una de las voces más críticas contra el actual presidente, esta ha resultado ser uno de los miembros más sólidos del equipo de Donald Trump y una excelente «cara» hacia la comunidad internacional para presentar las políticas impopulares del presidente.

En la ONU, la embajadora ha destacado por defender la postura del presidente de Estados Unidos en ámbitos tan controvertidos como Palestina, Corea del Norte e Israel. La salida de Haley abre una nueva incógnita en el equipo de Trump. «Te echaremos de menos. Has hecho un trabajo tremendo», declaró Donald Trump en presencia de la embajadora en el Despacho Oval.

La hasta ahora embajadora ha destacado estos dos últimos años por su trayectoria y temperamento en la ONU. Hija de inmigrantes indios, y con 46 años, fue la primera mujer en gobernar el Estado de Carolina del Sur y es una de las pocas figuras femeninas del Gabinete de Trump.

El futuro de Haley y el puesto de embajadora en la ONU                                         

La exgobernadora de Carolina del Sur continuará en su puesto hasta finales de este año para que su sucesor o sucesora pueda tomar el relevo de forma más tranquila. Además, Haley ha de decidir cuál será su próxima ocupación, teniendo en cuenta la propuesta que le presentó Trump de volver a su antiguo puesto en la Administración.

El presidente de Estados Unidos ya ha presentado la posibilidad de que Ivanka Trump, su hija y vicepresidenta de Real Estate Development and Acquisitions de The Trump Organization, ocupe la vacante de embajadora ante Naciones Unidas.

Estos son los altos cargos que han dejado la Administración Trump desde su llegada al la Casa Blanca:

  • Rex Tillerson, director de la CIA, fue sustituido por Trump días después de aceptar la reunión cara a cara con el líder norcoreano, Kim Jong-un. Tillerson había admitido «sus discrepancias» con algunos asuntos de política internacional, en concreto sobre el pacto nuclear iraní y la crisis norcoreana.
  • Gary Cohn, principal asesor económico de Donald Trump, presentó su dimisión poco después de que el presidente anunciase la imposición de aranceles al acero y al aluminio, y tras meses de desencuentros en asuntos económicos y sociales.
  • Tom Price, secretario de Salud y Servicios Sociales, dimitió bajo asesoramiento de Trump tras conocerse que había gastado hasta 400.000 dólares en vuelos de avión privados. A pesar de que el presidente le sigue considerando «un buen hombre», aseguró que perdonarle iba en contra de su promesa presidencial de «limpiar la ciénaga de corrupción» de Washington.
  • James Comey, director del FBI, fue despedido por el propio Trump ante los medios de comunicación tras responsabilizarse de reabrir el caso de los correos de Hillary Clinton, días antes de las elecciones presidenciales. Los demócratas le acusan de ser parte del motivo de la derrota de Hillary frente a Trump, junto con la trama de Rusia. Fue por ello por lo que el presidente estadounidense calificó su actitud como indefendible antes de expulsarle del cuerpo: «La reputación y la credibilidad del FBI han quedado severamente dañadas». La misiva llegó antes a los medios que al propio Comey.
  • Michael Flynn, consejero de Seguridad Nacional, anunció su dimisión tras la revelación en varios medios de que mantuvo contactos con el Kremlin sin comunicárselo al Gobierno; el mayor de ellos, un encuentro con el embajador ruso en Washington, Sergei Kislyak. Flynn, registrado como demócrata y nombrado jefe de la Unidad de Inteligencia del Pentágono por Barack Obama, había sido escogido como mano derecha de Trump por su cercanía a Moscú.
  • Sally Yates, fiscal general responsable del Departamento de Justicia, fue cesada tan solo diez días después de su nombramiento. La destitución vino después de que la fiscal se negase a defender el veto migratorio del presidente y lo calificase de ilegal. «Ha traicionado al Departamento de Justicia al negarse a aplicar una orden designada para proteger a los ciudadanos», declaró la Casa Blanca después de su expulsión.