El psicólogo y psiquiatra Nicholas Allen, de la Clínica Mayo en Rochester (Minnesota, Estados Unidos) ofrece recomendaciones para mantener un equilibrio saludable entre el trabajo y el estudio, lo que evita el estrés y la sensación de estar abrumado.
La Clínica Mayo es una organización sin fines de lucro que se dedica a la medicina, la educación y la investigación. Su enfoque es reunir a expertos para trabajar juntos y encontrar soluciones a los principales problemas de salud.
Según Allen, uno de los primeros pasos para manejar el estrés es empezar a organizar tareas pendientes. Priorizar y planificar haciendo listas diarias o agendas puede ayudar a centrarse en las actividades más urgentes, mientras que dividir tareas grandes en pasos pequeños reduce la preocupación.
Otro aspecto crucial es mantenerse activo físicamente. Allen explica que cualquier tipo de actividad física puede ayudar, ya que promueve la liberación de endorfinas y mejora el estado de ánimo. De hecho, un informe de la Organización Mundial de la Salud (OMS) destaca que la actividad física regular reduce los síntomas de depresión y ansiedad y mejora el bienestar general. La alimentación también es importante para combatir el estrés. Una dieta equilibrada con frutas, verduras y granos integrales ayuda al bienestar físico y mental.
Es importante evitar hábitos poco saludables, como el consumo excesivo de cafeína, alcohol o drogas, así como aprender a establecer límites y decir «no» cuando sea necesario. Esto ayuda a mantener un orden en la vida laboral y personal, lo que preserva la salud mental. Allen también menciona la importancia de reafirmar el propio valor, reconociendo los propios límites físicos y emocionales y evitando poner las necesidades personales en segundo plano.
En la parte del manejo del tiempo, Allen sugiere trabajar en bloques temporales, tomando descansos cortos para evitar el agotamiento y mantener la concentración. También explica cómo la multitarea, aunque parezca beneficiosa, puede generar una sensación de saturación y ser contraproducente.
El contacto social puede ser un alivio significativo para el estrés. Hablar con amigos o familiares da apoyo emocional y distracción. Aunque en casos de estrés persistente, ya recomienda ir a un terapeuta.
El descanso adecuado es clave. Como adulto, dormir entre siete y nueve horas por noche permite al cuerpo y la mente recuperarse, mientras que técnicas como escuchar música relajante o evitar el uso de dispositivos electrónicos antes de dormir pueden mejorar la calidad del sueño. Estudios de la Sleep Foundation muestra que el sueño de calidad mejora la concentración, la memoria y el rendimiento general.
Como estrategia adicional, Allen aconseja llevar un diario para expresar pensamientos y emociones, lo que facilita una manera de sacar tensiones acumuladas.