El alcalde de Nueva York, Eric Adams, ha declarado el estado de emergencia por la crisis migratoria. Desde septiembre, están llegando una media de seis autobuses llenos de inmigrantes a la ciudad neoyorkina. Asimismo, a partir del mes de abril más de 17.000 personas han accedido desde el sur del país. Adams ha expresado, durante una conferencia de prensa, que la mayoría son familias con niños que necesitan atención médica.
En Nueva York, los costes de atención a los refugiados son de 1.000 millones de dólares. Ante esto, Adams ha pedido más fondos, ha expresado que la ciudad se quedará sin dinero para otras prioridades y que se está llegando al límite para ayudar en la causa.
Traslado de inmigrantes entre estados
Estados republicanos como Florida, Texas y Arizona pretenden enviar inmigrantes a estados demócratas para moderar la tasa de inmigración y, al mismo tiempo, coaccionar a la Casa Blanca para que imponga medidas que consigan disminuir el número de personas que migran a Estados Unidos desde el sur.
La declaración del estado de emergencia en Nueva York permitirá a la ciudad aportar recursos y acelerar el proceso de ayuda a migrantes. Un portavoz de Greg Abbott, el gobernador de Texas, ha rechazado el estado de emergencia. Texas está enviando a numerosos migrantes a la ciudad de Nueva York. La mayoría son de Caracas (Venezuela) y entraron a Estados Unidos a través de la frontera con México.
“No somos un estado santuario”
El representante del Estado de Florida, Ronald DeSantis, manifestó: “No somos un Estado santuario”. A esto agregó: “Y sí, vamos a facilitar ese traslado para ustedes”. La organización de Abogados por los Derechos Civiles ha demandado al gobernador republicano y al Estado de Florida para evitar que a los migrantes se les prohíba la entrada al país y se les lleve a otros estados no republicanos.
In Florida, we take what is happening at the southern border seriously.
We are not a sanctuary state, and we will gladly facilitate the transport of illegal immigrants to sanctuary jurisdictions. pic.twitter.com/YeEbMzy8yG
— Ron DeSantis (@GovRonDeSantis) September 15, 2022
El equipo de comunicación de DeSantis ha afirmado que los traslados fueron voluntarios y que estas personas se encontraban hambrientas y sin hogar. Asimismo, ha denunciado que los activistas no se han preocupado por ellas.
El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, ha condenado los traslados de inmigrantes y cree que “no es racional deportar a migrantes de vuelta a Cuba, Venezuela y Nicaragua”. Aun así, Estados Unidos ha detenido en un año a más de dos millones de migrantes, hecho que ha provocado que Biden sea criticado por algunos ciudadanos, a lo que el presidente ha respondido que quiere trabajar en la inmigración para rebajar el número de migrantes que llegan al país.