Estados Unidos celebra unas elecciones presidenciales, el próximo martes 5 de noviembre, que pueden marcar tanto su futuro del como la hoja de ruta con otras potencias mundiales, como China o Rusia.
Una de las noticias más destacadas es la candidatura del expresidente Donald Trump a las primarias del Partido Republicano. El magnate americano intenta ser el candidato republicano y volver a ser presidente, algo que no logró en 2020. Joe Biden, el actual presidente, derrotó a Trump en las últimas elecciones y aspira a ser el candidato demócrata.
Cómo funcionan las primarias
Tantos los candidatos presidenciales republicanos como los demócratas se eligen directamente, pero tienen que pasar por un proceso de votación denominado como las primarias.
Las primarias son asambleas privadas realizadas por cada partido político en las que los participantes se dividen en grupos dependiendo del candidato al que apoyen. Los indecisos forman su propio grupo.
Cada grupo pronuncia discursos en favor de su candidato, y tratan de conseguir el apoyo del resto de integrantes. Al final, se vota y el número de votantes en cada grupo determina cuántos delegados se lleva cada candidato. En cada estado se celebran unas.
Las primarias pueden ser abiertas, cuando las personas votan por un candidato de cualquier partido político; cerradas, en las que solo pueden participar los votantes que eligieron a ese partido en su inscripción para votar; y, semiabiertas o semicerradas, que no son más que variaciones de los dos primeros tipos mencionados.
Al terminar las primarias, los partidos políticos realizan una convención nacional y, allí, los ganadores reciben la candidatura del partido.
Las primarias en el Partido Republicano
Tras la finalización de su Presidencia, algunos de sus simpatizantes asaltaron el Capitolio, Donald Trump vuelve a ser el foco de atención en el Partido Republicano. Por ahora, es el máximo favorito a revalidar la candidatura, algo que está demostrando con los resultados que ha cosechado hasta el momento en las primarias republicanas. Lidera la clasificación y cuenta con el apoyo de 122 delegados. Le siguen Nikki Haley, en segunda posición, con 24 delegados, y, por último, los únicos candidatos que consiguieron el apoyo de algún que otro delegado: Ron DeSantis y Vivek Ramaswamy, que abandonaron el 21 y 15 de enero, respectivamente.
Una señal de demostración del favoritismo de Donald Trump es lo ocurrido el pasado martes 6 de febrero. Tenían lugar las primarias en el estado de Nevada y el magnate no podía presentarse por diversos problemas legales. Todo hacía indicar que iba a ser una victoria fácil para Nikki Haley, la única candidata aquel día. A pesar de todo, no ganó. En las papeletas, había una segunda opción que, con un 63,2% de los votos, se alzó con el triunfo: “Ninguno de los candidatos”. Después de las votaciones, molestos con la derrota, el equipo de Haley declaró que «no se molestarían en jugar a un juego amañado en favor de Trump».
Las primarias en el Partido Demócrata
Las primarias en el Partido Demócrata, Joe Biden anunció que se presentaría a la reelección. El pasado enero tuvo lugar una de las primeras votaciones en New Hampshire, y el actual presidente se proclamó ganador con un 63,9% de los votos.
Históricamente, los mandatarios estadounidenses que se presentan a la reelección tienen ventaja sobre los demás candidatos a la hora de ganar las primarias. Por lo que Biden, aun siendo uno de los presidentes con una de las popularidades más bajas, sin aparecer en las papeletas y sin participar en ningún acto de campaña, ha logrado el triunfo en New Hampshire.
Trump y su inhabilitación
Desde que Trump anunciara en noviembre de 2022 su intención de presentarse a las elecciones de este año, la maquinaria judicial comenzó a trabajar. En marzo de 2023, se convirtió en el primer expresidente de la historia de Estados Unidos en ser acusado penalmente. A lo largo del año pasado, se le sumaron 91 cargos, cuatro imputaciones penales (dos a nivel federal), una condena civil por abuso sexual y difamación a la escritora y periodista Elizabeth Jean Carroll, y otra condena por fraude económico.
A tenor de los últimos resultados, el expresidente republicano ha sabido sacar rédito de sus problemas frente a la justicia estadounidense y alude a una “caza de brujas” y una “persecución política”.
Trump todavía se enfrenta a uno de los casos más graves de los que se le acusa: el asalto al Capitolio del pasado 6 de enero de 2021. Lo que le ha llevado a desaparecer de las papeletas de algunos estados como Nevada podría conllevarle a su inhabilitación definitiva y dejarle fuera de la reelección.
La memoria de Biden
Un informe del Departamento de Justicia sobre el manejo de documentos falsificados por Joe Biden indica que el presidente sufre problemas de memoria, lo que ha generado la tensión entre los demócratas. El fiscal Robert Hur, redactor del informe, señaló la deficiente memoria del mandatario: «La memoria del Sr. Biden era peor. No recordaba cuando fue vicepresidente ni cuando murió su hijo Beau»
Algo que demostró el propio Biden en una conferencia de prensa, cuando confundió al presidente de Egipto con el de México: “Creo que inicialmente el presidente de México, Sisi, no quería abrir la puerta para permitir la entrada de ayuda humanitaria en Gaza”.
«El presidente de México, Sisi, no quería abrir la puerta de Gaza a la ayuda humanitaria», declaró Joe Biden.
El Partido Demócrata ha salido en su defensa y denunciaron la parcialidad del fiscal Hur, al que acusan de su amistad con figuras republicanas, tal y como lo hizo la vicepresidenta estadounidense, Kamala Harris: “La forma en la que se caracterizó la conducta del presidente en ese informe no podría ser más errónea. De esa manera, deberíamos esperar que hubiera un nivel de integridad más alto que el que vimos”.