El proyecto Theia (diosa mitológica Titánide de la vista) puesto en marcha por el Barcelona Institute of Sciencie and Technology (BIST), consiste en la creación de una nueva retina hecha de grafeno la cual sea capaz de devolver la vista a todas aquellas personas que no puedan ver o que tengan problemas de visión.
El grafeno es un material nanométrico bidimensional, elástico y flexible, y está dotado de una gran conductividad térmica y eléctrica, lo que le permite disipar el calor y soportar intensas corrientes eléctricas sin calentarse. Es el material más resistente que se conoce en la naturaleza. Además, tiene una alta movilidad de sus electrones, propiedad que eleva su potencial uso en los veloces nanodispositivos del futuro.
En el mundo, hay entre 40 y 45 millones de ciegos, 135 millones con baja visión, aunque el 80% de los casos se pueden prevenir o curar, según la OMS (Organización Mundial de la Salud) y el Organismo Internacional de la Prevención de la Ceguera. Dada la complejidad del proyecto, el BIST se ha unido a otros siete institutos de investigación, por lo que la investigación es más completa.
El implante de grafeno se situará en contacto con la retina para estimular las neuronas gaglionares (responsables de llevar los impulsos al cerebro), a través de una serie de electrodos. Actualmente, se están haciendo pruebas in vitro para asegurarse de su correcto funcionamiento, pero pronto empezarán a realizar pruebas en cerdos enanos, ya que su ojo, fisiológicamente, es similar al ojo humano.