La Universidad Francisco de Vitoria (UFV) celebró, el pasado 11 de diciembre, una formación de delegados y un encuentro con el rector. Estos sirvieron de megáfono para los alumnos de la universidad; que, por medio de sus representantes, pudieron presentar sus pensamientos. La codelegada de 2ºA de Periodismo, Cecilia Solana, fue una de las asistentes de la jornada.
¿En qué consistió la Jornada de Formación de Delegados?
Asistimos como unos 80 delegados, en ella se habló sobre las funciones que tiene el consejo y sobre las nuevas herramientas de comunicación interna, como es el Office 365, que todos tenemos disponible. Luego tuvimos la comida y la charla con el rector. Nosotros lo que hacemos es transmitir al rector algunas dudas, sugerencias o quejas sobre la universidad. Por ejemplo, se habló del wifi, de la rotonda nueva, el nuevo edificio, las licencias de Adobe… Una especie de diálogo entre el rector y los delegados.
Siendo este tu segundo año, ¿encontró alguna diferencia con la anterior formación?
No encontré diferencias, quizás la gente sí que estuvo más participativa a la hora de transmitir al rector, en diferencia al año anterior, pero poco más.
¿Qué opina sobre el nuevo término codelegado?
El término codelagado me parece bien, al principio me parecía horrible, pero conforme pasaron las formaciones de delegados y fui conociendo a otros delegados y miembros del consejo, me di cuenta de que este nombre tenía sentido porque mi labor no es la de suplir al delegado, sino trabajar igual que él, estar a su lado y apoyarle, igual que el delegado me va a apoyar a mí. Él ni hace más trabajo que yo, ni es más importante que yo, igual que yo tampoco lo soy.
¿Cuántas formaciones hay al año?
Hay un mínimo de dos formaciones al año, pero se suelen hacer en torno a tres o cuatro formaciones. Esta última era más para conocer el consejo y cómo funciona. Dentro de cada grado, hay dos representantes que lo forman y esto es algo que se desconoce muchísimo. Otra de este año, consistió en la resolución de conflictos. Participamos en una yincana por la universidad, donde teníamos que hacer diferentes pruebas y donde al final todos los equipos nos apoyamos para hacerlo en el menor tiempo posible.
¿Qué le parece que la universidad organice estas jornadas?
Las formaciones me parecen muy útiles, aunque a veces se hacen repetitivas. Hay gente que lleva cuatro años siendo delegados y lo escuchan cuatro veces. Otras son distintas, pero todas tienen un aporte porque de ahí viene la relación entre delegados que es genial y esto es gracias a estas formaciones. Estas enriquecen a los delegados, por los puntos de vista tan distintos que hay. Grandes personas que me voy a llevar de la universidad son delegados y son, además, miembros del consejo.