El 25,5% de los jóvenes españoles de 14 a 18 años ha apostado presencialmente en juegos de azar en los últimos 12 meses, mientras que otro 10,3% lo ha hecho on line, según el último estudio realizado por el Gobierno.
El problema del juego ha aumentado en España durante los últimos años. De hecho, cada vez es mayor el número de tratamientos destinados a combatir una adicción patológica que afecta al 1% de la población española mayor de 18 años.
Las facilidades que ofrecen las casas de apuestas para registrarse on line y la publicidad están derivando a que los jóvenes crean que pueden ganar dinero de forma rápida y sencilla.
Para combatir el riesgo que conlleva apostar impulsivamente, el Gobierno ha aprobado la nueva Ley del Juego, que hace hincapié en cuatro aspectos.
El primero de ellos es que la publicidad de los operadores de juego se deberá hacer bajo el principio de ¨responsabilidad social», con lo que quedarán prohibidas las que inciten a actitudes o comportamientos antisociales, violentos, humillantes y den lugar a daños económicos, sociales o emocionales.
El segundo es que el Gobierno pondrá en marca un Registro General de Interdicciones de Acceso al Juego y ordenará a las autoridades autonómicas a que interconexionen la información de sus correspondientes registros.
El tercer aspecto es que el Gobierno va a establecer unas directrices en el ámbito digital para el uso más seguro y responsable de los «activos digitales no fungibles», es decir las cajas botín o mecánicas de monetización de los usuarios de videojuegos.
El cuarto aspecto hace referencia a que con esta ley se modificará la Ley General para la Defensa de los Consumidores y Usuarios, esto se hace para que las sanciones que se impongan se puedan adecuar a la capacidad económica de la empresa infractora.
Por ejemplo, hace unos meses, las casas de apuestas Codere, Betfair y 888sport fueron multadas con más de cuatro millones de euros. Aun así, estas empresas son de las más populares del sector.