Quique Pina, exjugador, empresario, agente de futbolistas y actual consejero delegado y responsable del área deportiva del Cádiz C.F., fue capturado este miércoles en su ciudad natal, Murcia, por agentes de la Unidad de Delincuencia Económica y Fiscal de la Policía en un procedimiento contra blanqueo de capitales derivados de fichajes de jugadores y actos ilegales. El murciano ya ha pasado a disposición judicial.
Además de ser acusado, también los agentes investigaron sus documentos en distintos lugares de España, como Barcelona, Murcia, en las oficinas del estadio del Granada C.F., equipo del que fue presidente desde 2009 hasta 2016 y en el estadio del Cádiz C.F. En su domicilio se realizó una investigación en sus archivos y documentos.
El presidente de La Liga, Javier Tebas, habló este jueves sobre el caso de Quique Pina: «Vamos a esperar las circunstancias, las diligencias son secretas y no conocemos nada. No es bueno que ocurran estas cosas en el fútbol y vamos a esperar».
«Vamos a esperar las circunstancias, las diligencias son secretas y no conocemos nada», aseguró Javier Tebas.
Pina no tuvo grandes éxitos en su carrera futbolística. Sin embargo, donde más triunfó y se ganó todo el respeto fue fuera de los campos de juego; primero siendo una persona crucial e importante para la llegada a España de futbolistas de talla mundial como Riquelme, Anelka, Saviola o Vieri; y, después, al frente de clubes como el Ciudad de Murcia, el Granada C.F. o el Cádiz C.F.
Una lesión hizo que dejara el fútbol y se pasara a los negocios. Fundó y por poco no llevó al Ciudad Murcia a conseguir el ascenso a Primera. Más tarde, acabó vendiendo esa plaza en Segunda al Granada 74, equipo que también tuvo relación con él.
Años después, se movió para colocarse al frente del Granada C. No obstante, no logró ningún ascenso con el equipo nazarí y eso le produjo problemas tanto dentro del club como fuera del equipo.
Tuvo una buena relación con Gino Pozzo, actual presidente del Udinese, conjunto italiano, y del Watford inglés, para intentar levantar al equipo de la crisis y de la quiebra, y devolver a la entidad andaluza a Primera División. En la temporada 2015-2016 vendió el club al empresario chino John Jiang. Actualmente, el Cádiz C.F. está luchando por ascender a primera.