Dieciocho películas les ha costado llegar hasta aquí. Lo que empezó con el Iron Man de Jon Favreau en 2008, se coronó con la entrega de Los Vengadores en 2012 e hizo a cinéfilos y frikis bailar al son de la banda sonora de Guardianes de la Galaxia en 2014, estrena ahora la primera parte de su fin, con una historia que cuenta con más de 20 héroes como protagonistas.
Cada personaje tiene su fandom, aunque Capitán América, Spider-Man y Iron Man suelan ser los más adorados, y nadie recuerde nunca que Jeremy Renner (Ojo de Halcón) también sale en las pelis. Han sido tantas las películas y personajes desarrollados, que cada uno ha acabado por coger cariño a su héroe o villano favorito. Hasta tal punto, que en esta última entrega muchos lo han tenido difícil para elegir bando.
Civil War dividió al equipo, Capitán América Vs. Iron Man. Ahora, se abren dos nuevos flancos. Thor (Chris Hemsworth) vuelve a la acción, sin martillo, pero con un hacha igual de eficaz, labrada por un gigantesco Peter Dincklage. El dios nórdico regresa en solitario con un único objetivo: acabar con Thanos, el villano más espectacular que ha creado Marvel. En segundo lugar, aparece el equipo conformado por los personajes de Guardianes de la Galaxia, liderado por el garrulo y poco avezado humano Peter Quill (Chris Pratt), que, además de la muerte de Thanos, busca, como siempre, ser el protagonista de la hazaña.
El propósito de este villano tan sensacional, que lleva varias escenas poscréditos dando de qué hablar, es conseguir completar el Guantelete del Infinito con las seis gemas de poder que existen en el universo.
Vengadores: Infinity War es una película hecha para los fans de los superhéroes. Especialmente, para esos que se saben los nombres de todos los personajes, hasta de los secundarios; los que leyeron los cómics o se vieron en YouTube videotutoriales sobre estos; para aquellos a los que no les gustó el Batman de Nolan, porque no era lo suficientemente fiel al que en su día crearon Bill Finger y Bob Kane. No obstante, también podrán disfrutarla todos los aficionados al cine de acción y al nuevo género de superhéroes cinematográfico.
Los hermanos Russo prometieron mucho. No menos que su promotora, con tanta campaña publicitaria y supuestos spoilers promocionales. Todo el bombo, sumado al estrepitoso fracaso de DC, ha generado tal nivel de hype que hasta los menos entusiastas del género comenzaron a sentir curiosidad por su estreno.
Llevaban tiempo gestando la que sería la batalla final, una oda al cómic que arrasaría en salas e incendiaría las redes sociales. Bien, si ese era el propósito de los hermanos Russo, lo han conseguido. Récord en taquilla y millones de usuarios en Twitter que todavía no saben cómo reaccionar a lo que Marvel y Disney les han presentado.
La productora que dio vida al ratón animado más famoso de todos los tiempos ha madurado, ha levantado la mano con Marvel y, con ello, ha creado una cinta oscura y cuidada más cercana a la filmografía de Christopher Nolan y George Lucas que a la de Zack Snyder, Joss Whedon o cualquier otro autor de cine de superhéroes. La muerte ya no es un tema tan tabú como lo era hasta ahora, y los gags de humor no son lo único que sustentan la trama.
La segunda entrega de Vengadores partió el corazón a millones de espectadores. Ahora, la tercera termina de romperlos con tales giros de guión, que ni el fan más maquiavélico habría conseguido identificarlos.
En dos horas y media de metraje convergen las historias de todos los personajes. Este recurso tan poco habitual es agradecido por los cinéfilos y comiqueros más adeptos al género, pero no tanto por el resto de espectadores que pueden terminar por perderse en los detalles.
El filme comienza inmediatamente después del final de Thor: Ragnarock, por lo que quienes no la hayan visto tendrán algunos problemas para enterarse del principio. Además, todavía sin cometer ningún spoiler, este punto de encuentro no es solo para los superhéroes protagonistas, sino también para el resto de personajes de la franquicia.
En resumen, Infinity War seguramente sea la mejor película de superhéroes que Marvel ha realizado nunca, aunque, sobre todo, serán los verdaderos expertos quienes podrán disfrutarla como se merece. Por fin, la productora ha conseguido lo que ninguna otra, hacer justicia a los cómics en la gran pantalla.