La ovalada vuelve a sonreír en España tras su victoria frente al seleccionado suizo, el domingo pasado. El XV del León venció por 43-13 a Suiza en un encuentro más reñido de lo anticipado. Esta y la anterior victoria frente a Países Bajos, por 53-24, le aseguraron el pase mundialista a Australia 2027, su segunda participación después de su debut en Gales 1999. España deja atrás las decepciones en Japón 2019 y Francia 2023, y la selección liderada por el argentino Pablo Bouza vuelve a formar parte del mayor escenario del rugby.
La trayectoria del León en el Campeonato de Europa
Bajo la dirección del seleccionador argentino y con la presidencia de Juan Carlos Martín Hansen, la selección española emprendió un camino de renovación y fortalecimiento desde su fallida participación en Francia 2023. El León combinó la experiencia de los jugadores presentes en las ligas europeas con los jóvenes talentos nacionales. En el Campeonato de Europa 2025, también conocido como Seis Naciones B, España mostró un destacado rendimiento.
El partido que disputó España frente a Países Bajos, el pasado 2 de febrero, en el Campo Central de Madrid no fue, quizás, su mejor actuación en el último tiempo, pero sí una de las más prolijas. A diferencia de encuentros anteriores, en las gradas del Central se respiraba un aire de esperanza, pero de mucha tensión, conociendo las anteriores frustraciones. El ambiente no alcanzó la intensidad de partidos como contra Rumania o Portugal, se centró más en evitar los errores que en un juego vistoso. Países Bajos demostró una mejoría con respecto a torneos anteriores, que se mantuvo en el partido durante gran parte del encuentro, sosteniendo una gran solidez en el juego físico y en el contacto, como predijo Pablo Bouza.
Ya con el partido prácticamente decidido, en los últimos minutos España optó por soltar un poco el acelerador, lo que permitió a los neerlandeses decorar un poco más el resultado. Pero la realidad es que a pesar de no haber sido uno de los mejores partidos del León, a diferencia del año pasado, las distancias entre los seleccionados se han vuelto a ampliar.
Se conocía poco sobre el seleccionado suizo, más allá de la abultada derrota frente a Georgia por 110-0. El pasado domingo, la selección española tomó control del partido desde el inicio. Sin embargo, el equipo de Bouza no logró asentarse en el campo en ningún pasaje del partido. Mostró un déficit en las fases estáticas, errores de manejo en el traslado de la pelota y cierta inseguridad en las fases defensivas. Muy lejos del nivel demostrado frente a Países Bajos, los leones acumularon casi una decena de penales en la primera mitad. “Creo que fue el peor partido desde que estoy”, ha admitido Bouza. “Se cometieron errores y nos fuimos complicando en el partido”, explicó.
Las dudas surgidas en el partido no opacan la alegría de las celebraciones mundialistas. Durante años, el rugby en España se había convertido en una excepción dentro de un país que suele brillar por sus deportes de equipo.
La clasificación del seleccionado masculino para Australia 2027 se suma a la de Las Leonas, seleccionado femenino, al mundial de Inglaterra 2025, a la lucha por la permanencia del seleccionado sub-20 en el Mundial y a la muy buena presencia de los seleccionados de Rugby Seven.
La presencia argentina y su rol en la clasificación
Dicho hito del equipo español tiene un acento argentino muy marcado. Ocho jugadores del seleccionado tienen sus raíces albicelestes, incluido su entrenador. Tras la culminación del último mundial en 2023, la Federación Española de Rugby apostó por la incorporación de Pablo Bouza como nuevo entrenador. El ex Puma, de 51 años, con pasado reciente en Los Teros, seleccionado uruguayo, llegó para liderar una completa transformación del equipo basada en las convocatorias de jugadores en las distintas ligas europeas, además de una buena cosecha de jóvenes promesas nacionales, que disputan los torneos domésticos.
En la conformación del seleccionado para enfrentar a Suiza, la presencia argentina se hizo notar principalmente en la línea de backs. Cinco de las siete posiciones que conforman a los backs fueron ocupadas por argentinos. La dupla de medios, 9 y 10, estuvo formada por Estanislao Bay y Gonzalo López Bontempo. Iñaki Mateu fue el centro externo, número 13. Martiniano Cian estuvo en una de las puntas. Y con la número 15, el full back, Federico Casteglioni.
Dejar el pasado atrás
Tras el debut del seleccionado del León en Gales 1999, España no ha logrado clasificarse para más mundiales por dos principales razones.
Por un lado, el roce internacional y la falta de nivel competitivo. Si bien España ha demostrado una clara mejoría en los últimos años, la falta de roce internacional contra selecciones de tier 1 juega un papel negativo en la evolución del equipo. Sin ir más atrás, su último encuentro con selecciones de dicha índole fue contra Argentina y Fiji, con resultados por 62-3 y 33-19, respectivamente.
Por otro lado, las sanciones por alineaciones indebidas. En las fases de clasificación para los mundiales de 2019 y 2023, en los que España estuvo cerca de obtener su plaza, fueron descalificados por no cumplir con los requisitos de elegibilidad establecidos por la World Rugby. En 2019, tras una investigación llevada a cabo por la World Rugby, descubrieron que dos jugadores del seleccionado español no cumplían con los requisitos mínimos de residencia. Estos fueron el francés Mathieu Belie y el neozelandés Bastien Fuster. Y más tarde, en 2023, se descubrió que habían falsificado documentos de un jugador, el sudafricano Gavin van der Berg, para intentar hacerlo elegible para su participación en el equipo.