Los ciudadanos británicos decidirán este 23 de junio si su país permanece o no en la Unión Europea. Tanto los europeístas como los euroescépticos continúan con sus campañas, mientras las últimas encuestas dan una pequeña ventaja a la estancia en el bloque comunitario. No obstante, a 24 horas de los comicios, hay un 9% de indecisos.
David Cameron, primer ministro de Reino Unido, dio un discurso este martes frente a la puerta de su residencia, el número 10 de Downing Street. En este, apeló a los ciudadanos de mayor edad, que son generalmente partidarios del Brexit: «Recuerden que ellos no podrán deshacer la decisión que tomemos. Si votamos por irnos, ya está. Es irreversible. Nos iremos de Europa para siempre y la siguiente generación tendrá que vivir con las consecuencias durante mucho más tiempo que el resto de nosotros».
Cameron: «Si votamos por irnos, ya está. Es irreversible. Nos iremos de Europa para siempre».
Boris Johnson, ex alcalde de Londres y líder de VoteLeave (la campaña a favor del Brexit), pronunció su último discurso en el debate sobre el referéndum: «Cuando tenemos 184.000 inmigrantes netos de la UE, y 77.000 de ellos vienen sin una oferta de trabajo, es obvio que ha llegado el momento de recuperar el control». Por esta declaración, Sadiq Khan, actual alcalde de la capital inglesa, le acusó de convertir el Brexit en el «Proyecto Odio».
Las consecuencias de un «sí» al Brexit
Desde el punto de vista legal, según el artículo 50 del Tratado de Lisboa, en caso de que un país desee salir voluntariamente de la UE, «el Estado miembro notificará su intención al Consejo Europeo. A la luz de las orientaciones del Consejo Europeo, la Unión negociará y celebrará con ese Estado un acuerdo que establecerá la forma de su retirada, teniendo en cuenta el marco de sus relaciones futuras con la Unión».
De esta manera, «los tratados dejarán de aplicarse al Estado de que se trate a partir de la fecha de entrada en vigor del acuerdo de retirada». Por lo tanto, desde el punto de vista económico, Reino Unido quedaría fuera del mercado único de la Unión Europea. Además, los mercados financieros, que sufren altibajos desde hace semanas, se verían afectados por la incertidumbre que causa el Brexit.
Para hacer frente a la posible crisis financiera, el presidente del Banco Central Europeo (BCE), Mario Draghi, y el del Banco de Inglaterra, Mark Carney, planean una estrategia para garantizar la liquidez, tanto en euros como en libras. Asimismo, es probable que los líderes del Eurogrupo se reúnan para fijar un camino a seguir.