El fútbol es uno de los deportes más populares en todo el mundo, y cada vez son más los niños que se suman a su práctica, a menudo, la presión y el maltrato que algunos entrenadores y padres ejercen sobre los jóvenes jugadores pueden tener consecuencias negativas en su salud mental y emocional. A pesar de la evolución y mejora significativas en diversos aspectos del deporte, como avances físicos y tecnológicos, así como el aumento en la competitividad y en la expansión global del deporte, la salud mental y emocional de los jugadores de fútbol a menudo ha sido subestimada y relegada a un segundo plano.
Este maltrato y presión ejercidos por algunos entrenadores y padres sobre los niños que practican este deporte es un ejemplo de esta falta de atención. Por esta razón, la importancia del trato psicológico en el fútbol infantil está siendo cada vez más reconocida como una necesidad fundamental para el desarrollo y bienestar de los futbolistas en el deporte.
La mirada profesional
La psicología es clave en el desarrollo deportivo de los niños en el fútbol base y según Marta Sánchez, psicóloga especializada en deporte, es importante por varias razones. “Desde aportar estrategias a los entrenadores para dominar el comportamiento de los jugadores, sus emociones y sus pensamientos, como para los propios jugadores que utilicen este contexto para aprender habilidades esenciales como la toma de decisiones, la tolerancia a la frustración o el control de estrés desde edades tempranas”, explica Sánchez.
Además, la forma en que los entrenadores y los padres se relacionan con los niños influye en su desempeño deportivo y su desarrollo psicológico. Los padres y los entrenadores pueden ser un apoyo positivo si sus prácticas son buenas y controladas en la línea de los conocimientos, y un apoyo negativo que puede llegar a generar ansiedad, frustración y desencanto, comenta Sánchez.
“Los padres y los entrenadores pueden ser un apoyo positivo si sus prácticas son buenas y controladas en la línea de los conocimientos, y un apoyo negativo que puede llegar a generar ansiedad, frustración y desencanto”, afirma Sánchez.
Para fomentar la motivación y la confianza en los niños durante la práctica del fútbol, se pueden emplear diversas estrategias adaptadas a cada caso específico. En primer lugar, se deben cumplir objetivos centrados en el progreso del jugador y que dependan de él al 100%, alcanzables para aumentar la confianza y en zona de potencial para ser un reto y aumentar la motivación, en estos casos se pueden aprovechar tareas divertidas y variables, precisa Sánchez.
Sin embargo, el abuso verbal y emocional por parte de entrenadores y padres puede tener un impacto negativo en el desarrollo psicológico de los niños. “La comunicación de padres y entrenadores es básica. Se cometen muchos errores en esta y tenemos que tener claro que el mayor punto a destacar es que debe estar planificada, un entrenador no puede solo decir lo bueno cuando tenga un día feliz y pegar doscientos gritos cuando tenga un día malo”, señala Marta Sánchez. También destaca la importancia de aplicar refuerzos y castigos verbales de manera planificada, aumentando el número de refuerzos y manteniendo una proporción significativamente mayor que los castigos.
En cuanto a las situaciones de estrés y ansiedad en los niños durante los partidos o competencias, la experta sugiere centrar al jugador en aquello que depende de él y entender que es un proceso que debe entrenar para soportar cada vez mayores contextos de estrés. En definitiva, la psicología es fundamental en el desarrollo deportivo de los niños en el fútbol base, no solo para su rendimiento deportivo sino también para su bienestar psicológico.
Al dirigirse a la otra perspectiva y hacerle preguntas a Bernardo Rodríguez, entrenador de niños y juveniles, nos comenta lo siguiente.
Según Bernardo Rodríguez, entrenador infantil y juvenil, gran parte del rendimiento de los jugadores en estas edades depende de su estado mental. “La mentalidad en el fútbol es clave para rendir a tu mejor nivel”, declara Rodríguez. El entrenador también destaca que ha visto muchos casos de jugadores que pueden ser estrellas del equipo cuando tienen confianza, pero que pierden esa confianza y se convierten en uno más. Animarlos y dejarles claro que tienen confianza plena en ellos es esencial para el entrenamiento.
Bernardo Rodríguez cree que la presión de los padres juega un papel importante en el fútbol base y puede convertir algo que es diversión en un infierno. Rodríguez recordó un caso extremo en el que un padre presionaba a su hijo y le gritaba e incluso le insultaba en el campo. El entrenador y el presidente del club tuvieron que hablar con el padre durante varias semanas para erradicar este problema, y finalmente el padre cambió. El consejo para los padres es que prioricen la felicidad de sus hijos y no les metan presión, independientemente de su nivel en el campo.
En cuanto a cómo manejaría a un padre que ejerce excesiva presión sobre su hijo, Rodríguez destaca: “Siempre que vemos este tipo de situaciones nos reunimos con el padre para hablar sobre el tema e intentar hacerle entender que lo valioso es que salga del partido más con una sonrisa que con un hat trick”
En cuanto a cómo manejaría a un padre que presiona demasiado a su hijo, Rodríguez destaca: “Siempre que vemos este tipo de situaciones nos reunimos con el padre para hablar sobre el tema e intentar hacerle entender que lo valioso es que salga del partido más con una sonrisa que con un ‘hat trick’”.
Bernardo Rodríguez también compartió su enfoque para garantizar que los niños se sientan apoyados y motivados durante su tiempo en el campo. Para él, lo principal es que los jugadores hayan dado todo y se lo hayan pasado bien, y no tanto ganar el partido. El entrenador felicita a los jugadores por cada acción correcta y les premia por sus esfuerzos para mantenerlos motivados. Es crucial que los jugadores vayan al campo con ganas y que no piensen que pierden el tiempo allí.
Asimismo, Rodríguez habló sobre las estrategias que recomienda para abordar los problemas emocionales y mentales que puedan afectar al rendimiento de los niños en el fútbol. El entrenador escucha a los jugadores cuando están desmotivados y habla con ellos al final del entrenamiento para que puedan expresar sus problemas. Él cree que es esencial que los jugadores sientan que los entrenadores son un punto de apoyo para sus problemas y que pueden aconsejarlos para superarlos: “Los entrenadores podemos ser una especie de psicólogo en muchos casos”.
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Luciano Nievas tiene solamente 11 años y es el capitán de la Selección de Córdoba que disputó un torneo en Chile. ¡ASÍ ARENGÓ A SUS COMPAÑEROS ANTES DE LA FINAL! ¿Resultado? 7-0 y campeones ???? pic.twitter.com/qYJhR1wUi9
— TyC Sports (@TyCSports) January 23, 2020
Destacar la importancia de la psicología en el fútbol y la necesidad de que los padres permitan que los niños jueguen en paz es muy relevante en la actualidad. Es necesario comprender que el fútbol, como cualquier otro deporte, no solo se trata de habilidades físicas, sino también de habilidades mentales y emocionales.
Los niños necesitan experimentar el juego por sí mismos, y los padres deben apoyarlos en lugar de presionarlos. Si se aborda adecuadamente, el fútbol puede ser una actividad muy beneficiosa para el desarrollo físico, mental y emocional de los niños.