“Hemos explicado que no podemos aceptar ninguna demanda con respecto a las acciones de nuestras Fuerzas Armadas en nuestro propio territorio”. Así respondía el ministro de Exteriores ruso, Sergéi Lavrov, a su homóloga alemana, Annalena Baerbock, acerca de la presencia de 100.000 militares rusos en la frontera de Rusia y Ucrania.
El martes 18 de enero tuvo lugar la primera reunión presencial entre Lavrov y Baerbock. Algunos soldados y equipos militares que ha desplegado Moscú provienen de los regimientos de Asia y Siberia. Una movilización que ha puesto en jaque a Ucrania y ha provocado la reacción de EE.UU y la UE. El presidente de Rusia, Vladimir Putin, ha decidido evacuar su embajada en territorio ucraniano, movimiento que algunos analistas identifican como antesala de un ataque ruso.
“Es difícil para los países europeos no percibir como una amenaza la gran concentración de tropas rusas”, aseguró Annalena Baerbock. De esta forma, la líder de la diplomacia alemana se suma a las palabras que pronunció Olaf Scholz, canciller de Alemania, en una visita a España, el pasado lunes. “Una agresión militar a Ucrania traería graves consecuencias”, observó Scholz. La situación en la frontera es inestable, al igual que en los despachos. Los encuentros diplomáticos en diferentes formatos desde el ultimátum que hizo público Moscú, el pasado 17 de diciembre, no han servido para apaciguar las tensiones entre ambas partes.
Para Vladimir Putin, si las “líneas rojas” de seguridad que impuso Rusia para la OTAN no se respetan, el Kremlin tomaría “las medidas de represalia técnico-militar apropiadas”. “La paciencia se ha agotado”, reiteró Lavrov, quien mostró su rechazó a las acusaciones de una posible invasión de Rusia a Ucrania.
Estados Unidos, atento al conflicto
“¿Creo que Putin va a poner a prueba la voluntad de Occidente y de la OTAN? Sí. Pero también creo que va a pagar un alto precio por ello, y que ahora no cree que va a costarle lo que le va a costar. Y creo que lo lamentará”, aseveró el presidente de Estados Unidos, Joe Biden, sobre las intenciones del Kremlin, en una rueda de prensa, el pasado miércoles.
El presidente estadounidense aceptó la negociación con Putin para dejar de enviar armamento a Ucrania, pero dijo “no” a la petición del presidente ruso acerca de excluir a Ucrania de la OTAN indefinidamente. El ministro de Asuntos Exteriores en España, José Manuel Albares, ofreció el pasado jueves 20 de enero el envío de cazas del Ejército del Aire a la OTAN, en una visita a Washington donde mantuvo una reunión con el secretario de Estado de EEUU, Antony Blinken. La ministra de Defensa, Margarita Robles, ha adelantado el envío en «3 o 4» días de la fragata Blas de Lezo al Mar negro.