El volcán de Cumbre Vieja, en La Palma, está activo desde el 18 de septiembre y su erupción afecta, especialmente, a las localidades de Todoque (en el municipio de Los Llanos de Aridane), El Paso y Tazacorte.
El portavoz del Instituto Volcanológico de Canarias (Involcan), David Calvo, ha explicado a Mirada21.es a qué se debe la erupción: “La Palma se sitúa en un entorno geológico llamado punto caliente, en el que hay un constante suministro de magma que se acumula bajo la isla y cuando tiene presión suficiente fractura las rocas ascendiendo, y ahí se produce la explosión”.
“La actividad del volcán se detecta con sismicidad, con geofísica, es decir, al igual que los terremotos, con geoquímica, por los gases que escapan por grietas y con la geodesia, es decir, con GPS para captar la deformación del terreno”, profundiza Calvo. Asimismo, aclara cuánto dura una erupción: “En general, las explosiones se producen de tres semanas a dos meses. Esto es, probablemente, lo más difícil de determinar a día de hoy porque depende del tipo de volcán”.
Tras días de erupción, la lava ha llegado al mar con una lengua de magma que ha avanzado por la montaña de Todoque en forma de cascada y ha descendido hacia el Océano Atlántico. El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha anunciado, este miércoles, que volverá a La Palma, después de su primera visita al comienzo de este fenómeno.
“Esto es un tema muy mediático, están deseando tener la imagen de la lava en el mar”, matiza Calvo.
El portavoz de Involcan justifica la expectación provocada por la llegada de la lava al mar: “El efecto que se produce cuando la lava llega al mar es la evaporación instantánea de millones de litros de agua y una reacción química, ya que se genera cloruro sódico y ácido clorhídrico y sulfúrico que provoca daños respiratorios por inhalación e irritación en la piel, y por la explosiones se forman fragmentos de vidrios que pueden meterse en los ojos. Por lo tanto es un tema serio, pero solo si estás cerca de la erupción”. “Esto es un tema muy mediático, están deseando tener la imagen de la lava en el mar”, matiza Calvo.
El portavoz de Involcan confirma que han sido desalojadas 6.500 personas de sus viviendas. Además, asegura: “No ha habido daños personales en cuanto a víctimas o heridos, pero sí se han destruido alrededor de 700 casas. Sin embargo, la presión psicológica es impresionante, ya que las ondas explosivas se escuchan a muchos kilómetros del volcán”. “Los expertos advirtieron de que la erupción era inminente, lo que es cierto es que nosotros no podemos saber si es en horas o en días, por lo que se comenzaron a hacer evacuaciones rápidas”, subraya Calvo.
Amanece en La Palma y comienza a formarse un delta de lava que poco a poco gana terreno al mar. pic.twitter.com/KNg6jy5Y4K
— Instituto Español de Oceanografía (@IEOoceanografia) September 29, 2021