La presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, inauguró el pasado 1 de diciembre el nuevo hospital construido para descongestionar los servicios sanitarios de toda la comunidad. A partir de este 11 de diciembre, han comenzado a ingresar los pacientes derivados de las urgencias de los hospitales del Servicio Madrileño de Salud (sermas).
La primera paciente que ha ingresado en este hospital es una mujer de 63 años, derivada de las urgencias del Hospital Universitario Gregorio Marañón. Esta ha entrado en el pabellón dos del hospital con una neumonía por Covid-19, aunque con un pronóstico estable y no demasiado grave. Tras ella, han ingresado en estos últimos días cinco nuevos pacientes. Con ellos, son ya seis los hospitalizados por COVID-19 en el Isabel Zendal, todos ellos vienen del Hospital Clínico y del Gregorio Marañón.
“Esta nueva infraestructura va a contribuir a que la Comunidad de Madrid siga contando con uno de los mejores sistemas sanitarios del mundo”, asegura Isabel Díaz Ayuso.
Este hospital, que se ha construido en 100 días, tiene una capacidad de 1.008 camas de hospitalización, 48 puestos de semicríticos (situación de pacientes previos a la UCI), 16 de UCI o cuidados intensivos y 32 de cuidados intermedios, todos ellos hacen un total de 1.056 camas nuevas. Con ello, Isabel Díaz Ayuso asegura que “esta nueva infraestructura va a contribuir a que la Comunidad de Madrid siga contando con uno de los mejores sistemas sanitarios del mundo”
Además de los 106 profesionales del Sermas que se han incorporado de forma voluntaria, también se ha contratado a 22 celadores, cuatro auxiliares administrativos, un auxiliar de Farmacia, cinco técnicos superiores especialistas en Radiodiagnóstico, un facultativo especialista en Medicina de Trabajo y un técnico superior de Prevención de Riesgos laborales.
Isabel Zendal y la vacuna de la viruela
La enfermera que da nombre a este nuevo hospital de emergencias de uso permanente, Isabel Zendal, nació en 1771 y fue la primera mujer del mundo en participar en una expedición sanitaria internacional. Fue madre soltera, un hecho difícil para la época, y su madre falleció por la viruela cuando ella tenía 12 años. Es considerada por la Organización Mundial de la Salud (OMS) como la primera mujer de la historia en misión humanitaria internacional.
Zendal tuvo un papel importante en la Real Expedición Filantrópica de la vacuna de la viruela realizada entre los años 1803 y 1812. En ella, esta enfermera se encargó de cuidar a los 22 niños que embarcaron en la expedición, ya que la vacuna para combatir la viruela tenía que llevarse dentro del cuerpo de los niños huérfanos. Entre estos niños a los que se les infectaba con una variante leve del virus se encontraba su hijo.
Tras esta expedición dirigida hacia las colonias españolas, lograron la inmunidad natural a la viruela. Esta enfermera fue la única mujer a bordo de la expedición, por ello su papel fue tan importante. Isabel Zendal también da nombre a una escuela de enfermeras en Puebla (México), donde se quedó a vivir tras el viaje.