Jorge Escohotado, hijo del filósofo Antonio Escohotado; Daniel Lacalle, doctor en Economía y analista en medios de comunicación; y José María Rotellar, también doctor en Economía y analista, se han reunido, este 14 de marzo, en el coloquio “Los enemigos del comercio”, celebrado en la Universidad Francisco de Vitoria. En este se presentó la VI edición de la revista universitaria Alma Mater UFV, un repaso a la economía global y a la importancia que esta tiene en la vida de las personas.
En este número de Alma Mater UFV, se compara religión con economía, se habla de la explotación y la economía del tiempo y se entrevistan invitados como los economistas León Gómez Rivas y Jesús Huerta de Soto. Asimismo, se explican las diferentes teorías económicas, la redistribución de la renta, el caso de Ferrovial y las criptomonedas. Por último, se hace un balance del significado de la libertad y se plantea la cuestión de si el dinero da la felicidad. Además, Alma Mater UFV ha contado con el foro de poetas de la Universidad Francisco de Vitoria para incluir algunas de sus páginas.
Totalitarismos y libertad
Escohotado, Lacalle y Rotellar, durante el coloquio, compartieron visiones acerca de los totalitarismos económicos en la actualidad y la falacia que existe en el concepto de desigualdad. “El objetivo del totalitarismo no es el progreso, es el control”, expuso Daniel Lacalle, quien también comentó que “lo que lleva a los movimientos totalitarios a atacar la libertad económica es el control del poder”.
Jorge Escohotado recordó la “magna obra” de su difunto padre, y propuso una dualidad en el sentimiento económico de los ciudadanos entre seguridad y libertad. Seguridad con “papá Estado, sin preocupaciones, pero sin libertades” frente a libertad, incertidumbre que genera avance y prosperidad. “Mucha gente no querrá que uno destaque por encima del otro”, afirmó. “Es la planificación estatal económica contra la libertad individual empresarial”, aseguró.
José María Rotellar, quien además es profesor de Economía en la UFV, incidió en las aseveraciones de sus contertulianos y señaló que “La libertad da prosperidad, y la prosperidad da independencia”. “Los totalitarismos quieren frenar ese avance. Solo quieren controlar y acaparar las esferas del poder con soberbia intelectual. Controlar, al menos, las esferas de la propiedad privada”, continuó.
“Pedro Sánchez habla de los empresarios y parece que son una especie a eliminar”, señaló Jorge Escohotado.
Lacalle manifestó su aversión contra Marx y declaró que “no trabajó nunca en su vida”, haciendo referencia al desconocimiento que este tenía sobre el concepto de plusvalía. Apuntó a las grandes crisis económicas de países como Venezuela o Cuba y rechazó el funcionamiento del intervencionismo, que, según explicó, solo “reparte escasez y miseria”. Escohotado defendió la misma línea y trajo el debate a España, apuntando hacia el Gobierno: “Pedro Sánchez habla de los empresarios y parece que son una especie a eliminar”.
Desigualdad de oportunidades
Rotellar concluyó con la posición de que la desigualdad de oportunidades realmente no existe, aunque reparó en la necesidad de una formación educativa: “Nadie debe quedarse sin estudiar, en eso hay que invertir porque revertirá en un beneficio en la sociedad”. “La desigualdad mimética es el factor más importante del progreso”, destacó Lacalle. “La desigualdad, gracias a Dios, es deseable. Si trabajas más, querrás destacar”, finalizó Escohotado.
“La desigualdad, gracias a Dios, es deseable. Si trabajas más, querrás destacar”, destacó Escohotado.
El coloquio terminó en torno a la política liberalista, ante lo que los invitados volvieron a comparar el panorama actual con el liberalismo clásico. “Es mucho más amable vender algo positivo que pedir un ajuste que dé un bien de manera duradera”, dijo Rotellar, quien admitió que el liberalismo había perdido fuerza de penetración. Escohotado se mostró preocupado ante la actitud existente hoy en día y afirmó que “impera la idea de igualar por abajo”. “Hay gente que piensa que trabajar es una esclavitud”, agregó. La formación de las personas, como pilar y necesidad fundamental, fue la conclusión de Daniel Lacalle, que busca reformular este paradigma: “Hay un problema de la educación en las familias”.