Las W-Series, una nueva competición en la que solo podrán participar mujeres, comenzarán en mayo de 2019. Este nuevo formato se ha creado con el objetivo de abrir camino al género femenino en un sector en el que predominan los hombres.
La competición constará de seis carreras de media hora de duración cada una, que tendrán lugar en los principales circuitos europeos, utilizados actualmente en la Fórmula 1 masculina. La organización ha anunciado la posible expansión hacia Asia, América y Australia en un futuro.
Las pilotos tendrán que superar una serie de pruebas de selección, entre las que se encuentran: trabajo con simuladores, test físicos, desenvoltura con los medios de comunicación y carreras en las pistas, para, finalmente, seleccionar a un máximo de 20 pilotos, que competirán por un premio de 1,5 millones de dólares (1,3 millones de euros).
David Coulthard, ganador de 13 grandes premios, junto con Adrian Newey, diseñador de Red Bull, forman parte del consejo asesor, además de encargarse de los entrenamientos de las pilotos. Dave Ryan, exdirector deportivo del equipo McLaren, ha sido nombrado director de carrera, y la abogado y banquera Catherine Bond será la directora ejecutiva.
¿Oportunidad o discriminación?
Tras el anuncio de la nueva competición, ha habido reacciones de todo tipo, desde detractores que aseguran es “un paso atrás” hasta simpatizantes que afirman que esto ayudará a que cada vez más mujeres puedan llegar a la élite de este deporte.
«En el corazón del ADN de las W-Series está la firme creencia que las mujeres pueden competir de igual forma con los hombres en el deporte del motor. De cualquier modo, unas series exclusivamente femeninas son esenciales de cara a forzar una mayor participación femenina», afirmaron los organizadores. Estos, aseguran que las mujeres necesitan una plataforma donde mejorar y desde la que dar un paso, y en un futuro poder correr en la Fórmula 1.
El proyecto ha sido criticado por las propias pilotos actuales, ya que ellas insisten en que quieren competir contra hombres, en lugar de tener una competición aparte.