El Congreso muestra su respeto por la muerte de Barberá

- Desmarcar - 24 de noviembre de 2016

Rita Barberá, exalcaldesa de Valencia y senadora ha fallecido debido a un infarto este miércoles. El hotel en el que ha sufrido la parada cardiorrespiratoria se encuentra a poca distancia del Congreso de los Diputados, por lo que algunos diputados del Partido Popular se han acercado al conocer la noticia.

El presidente, Mariano Rajoy, ha sido uno de los primeros en hacer declaraciones acerca del fallecimiento de su compañera. “Queremos transmitir a su familia y a todos los miembros del Partido Popular nuestro sentimiento y nuestro pesar desde la Dirección Nacional del partido. Rita Barberá ha dedicado toda su vida a Valencia y al Partido Popular. Me siento enormemente apenado. Realmente se hace muy duro esto”.

El expresidente Aznar: «Lamento que haya muerto antes de ver archivada la causa abierta contra ella».

De igual manera, el portavoz del Gobierno y ministro de Educación, Cultura y Deporte, Íñigo Méndez de Vigo, se ha mostrado afectado por el fallecimiento de Barberá y ha confesado que su “pesar es por no haber hablado más con ella”. “Al final, la vida te pega estos hachazos”, ha añadido.

El expresidente José María Aznar ha lamentado “que Rita Barberá haya muerto habiendo sido excluida del partido al que dedicó su vida”. “Y lamento que haya muerto antes de ver archivada la causa abierta contra ella y, con ello, restablecido el buen nombre que para mí siempre tuvo», ha dicho en un comunicado.


Los diputados de todos los partidos políticos, a excepción de Unidos Podemos, han guardado un minuto de silencio en el Congreso. El secretario general de Podemos, Pablo Iglesias, ha justificado la decisión que su grupo ha tomado porque “es compatible con la coherencia”. Los miembros de su formación no han querido participar “en un homenaje político” por alguien “cuya trayectoria está marcada por la corrupción”.

«Quizá tendría más sentido homenajear a las víctimas de la pobreza energética o de la corrupción», ha declarado Iglesias.

Otros colegas de la difunta senadora han elogiado a Barberá desde el punto de vista tanto personal como profesional. “Era una magnífica política”, ha dicho María Dolores de Cospedal, ministra de Defensa. La diputada del Partido Popular por Málaga Celia Villalobos ha asegurado que “era una persona honesta”. Asimismo, el expresidente de la Generalitat Valenciana Francisco Camps ha confesado sentirse “muy apenado” y ha calificado que la exalcaldesa era “una mujer extraordinaria”.

Además, Iglesias ha aprovechado para declarar que “quizá tendría más sentido homenajear a las víctimas de la pobreza energética o de la corrupción”. De igual manera, el secretario general de Izquierda Unida, Alberto Garzón, quien tampoco ha participado en el homenaje, ha afirmado que “los homenajes a personajes corruptos sobran”.

La decisión de no asistir al minuto de silencio no ha sido bien vista ni por el PP ni por el resto de partidos políticos que conforman la oposición. El vicesecretario de Organización del Partido Popular, Fernando Martínez Maíllo, ha manifestado su desacuerdo: “Antes que políticos, somos personas. Con independencia de cualquier diferencia de criterio, creo que la dignidad del político y la persona merecían que todos hiciéramos ese minuto de silencio”.

“Pesará sobre la conciencia de algunos haber dicho determinadas cosas sobre Rita Barberá, una mujer que siempre luchó por Valencia”, ha asegurado el ministro de Justicia, Rafael Catalá. Asimismo, a través de su perfil de Twitter, Rafael Hernando, portavoz del Grupo Parlamentario Popular en el Congreso, ha instado a Iglesias a “que haga una profunda reflexión”.

Desde el PSOE, el portavoz de este grupo en el Congreso, Antonio Hernando, ha declarado que “es un día para mostrar respeto por el fallecimiento de una persona, para acompañar a su familia y amigos, y eso es lo que ha hecho el Congreso de los Diputados”. “Creo que todo lo demás sobra”, ha añadido. Susana Díaz, presidenta de la Junta de Andalucía, ha afirmado que el respeto no debe “confundirse con otro tipo de polémicas que no tienen sentido ni lugar”.